Hasta la fecha, la producción en los ingenios azucareros alcanzó los 1,5 millones de quintales, es decir 50 por ciento de los 3 millones de quintales producidos el año pasado para estas fechas, informó ayer el dirigente fabril, Vitaliano Mamani.
Por su parte, el presidente del directorio del ingenio azucarero Guabirá, Carlos Eduardo Rojas, admitió que la producción de azúcar en el oriente boliviano confronta serias dificultades debido a los fenómenos climáticos que retrasaron en dos meses la zafra 2014 y mantienen todavía “encharcados” los campos de producción.
“Que hay problemas los hay, que estamos dos meses retrasados en la zafra es evidente y que la producción hasta el momento no es la misma del año pasado es cierto; pero hay que esperar todavía cómo se comporta el tiempo y cómo se desarrolla la zafra más adelante”, sostuvo.
Refirió que debido a la prolongación de las lluvias, las condiciones de trabajo en el campo “son de mucha dificultad, están muy blandos los terrenos, no se está cosechando materia prima suficiente, el transporte de caña a los ingenios se torna dificultoso y la mayoría de los ingenios azucareros no está trabajando a toda su capacidad”.
A pesar de las dificultades en la zafra, Rojas informó que, por el momento, no hay desabastecimiento del producto, mucho menos incremento de precios, debido a que existen suficientes volúmenes del producto almacenado.
“En todo caso, estamos esperando que las condiciones del tiempo mejoren para poder avanzar hasta noviembre la zafra y recuperar el tiempo perdido”, sostuvo. Agregó que hasta el momento la zafra alcanzó un 35 a 40 por ciento de las 140 mil hectáreas sembradas este año.
A tiempo de señalar que la demanda anual de azúcar llega a 8,5 millones de quintales, muy por encima de los 1,5 millones de quintales producidos, demandó del Gobierno una política de incentivo a los productores.
Evaluación pendiente
A pesar de las dificultades actuales para la producción de azúcar, el presidente del directorio del Ingenio Guabirá, Carlos Rojas, dijo ayer que todavía es “demasiado temprano” para determinar el grado de afectación que tendrán los fenómenos climáticos, tanto en la zafra como en la producción de azúcar.
Añadió que para determinar si habrá o no escasez de azúcar es preciso esperar los resultados de una evaluación técnica prevista para septiembre sobre el rendimiento productivo de la zafra de este año.
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