El responsable de la Unidad de Medio Ambiente de la Subgobernación, Alan Villena, señaló que debido a que los últimos tres años la zafra azucarera fue irregular, existe mucha caña vieja, sin cosechar, acumulada en campo.
Este excedente podría motivar quemas masivas, indiscriminadas y descontroladas. Los efectos de esos fuegos afectarían a cañaverales que no están programados para la cosecha en esta gestión e incluso a áreas comunales y forestales. Frente a esta situación, los técnicos de la Unidad de Medio Ambiente de la Subgobernación trabajan en un plan de contingencia.
Villena explicó que el plan tiene como finalidad coordinar acciones con los dirigentes de las instituciones cañeras, los productores cañeros, los jefes de grupo de cosecha de caña, los zafreros y los comunarios, para realizar quemas de cañaverales debidamente planificadas, programadas en horarios adecuados y que cuenten con la participación de todos los actores, incluso previendo evacuaciones de emergencia.
El funcionario señaló que la Subgobernación cuenta con dos carros bomberos, y con personal capacitado en gestión de riesgo además de bomberos voluntarios, para actuar oportunamente en situación de quemas indiscriminadas y fuera de control, evitando ocasionar daños a la comunidad y a terceras personas.
“Estamos trabajando en el Plan de Contingencia –dijo Villena-. Inmediatamente lo tengamos concluido, se lo socializará con todos los sectores que intervienen en la cosecha de caña. Estamos priorizando acciones para mitigar y reducir la contaminación atmosférica por el humo y la carbonilla. Se establecerán horarios de quema, se restringirán quemas de cañaverales después de las 10 de la mañana y hasta las cuatro de la tarde. Se recomendará que las quemas sean muy bien planificadas. Se debe comunicar a los colindantes, vecinos, comunarios. Se deben efectuar trabajos conjuntos entre todos los actores de la zafra, se autorizará la quema en horarios de la noche y de la madrugada”.
El funcionario señaló que la Ley 1333 de Medio Ambiente es clara: define, norma y regula toda actividad que vaya a dañar la tierra, el agua, los recursos naturales, el aire que respiramos y el mundo en qué vivimos. Aclaró que no se aceptarán los argumentos de los cañeros y jefes de grupo, quienes suelen argumentar falta de dinero y austeridad para realizar quemas que luego afectan vastas zonas. Dijo que todos deben contribuir a evitar la quema indiscriminada y descontrolada de cañaverales en la época de zafra 2016.
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