A media fuerza y en medio de dificultades, la agroindustria azucarera Unagro dio inicio a la molienda de caña de azúcar proyectando una producción de 3,5 millones de quintales de azúcar, 400.000 más que en 2014. Igual proceso productivo prevé poner en marcha hoy la factoría montereña Guabirá.
En el caso de Unagro, ayer una misa cerca de las 11:00 antecedió el pitazo de las sirenas que anuncian el comienzo de la molienda. En el preámbulo, el presidente de Unagro, Luis Barbery, llamó a los fabriles a trabajar en la eficiencia productiva para sortear los problemas que aquejan al sector derivados del clima, tendencia a la baja del precio en el contexto interno y externo y el contrabando.
A su juicio, estos tres factores están complicando las actividades productivas y restando competitividad a la industria azucarera. Dio cuenta de que las lluvias, aparte de retrasar la molienda, condicionan el ingreso de materia prima a los ingenios y tiene a los cañeros con las cuentas en números rojos. Agregó que la tendencia a la baja del precio del ‘grano blanco’ en el contexto interno y externo está limitando el crecimiento y las inversiones del sector y que el contrabando les está dando el tiro de gracia.
En este último punto, Barbery indicó que tienen información de la internación masiva de azúcar de Argentina y Brasil por la devaluación de las monedas en ambos países. En ese marco, planteó al Gobierno decretar salvaguardas arancelarias para proteger el mercado interno.
A pesar de este panorama adverso y la disminución del área agrícola cañera de 146.000 a 131.000 hectáreas en el último año, Unagro prevé producir 3,5 millones de quintales de azúcar, 400.000 más que en 2014.
De su lado, el presidente del ingenio azucarero Guabirá, Carlos Rojas, indicó que ya se prendieron los motores en la factoría y que desde hoy tienen programado empezar a moler caña para producir los tres millones de quintales proyectados para este año. En 2014 generaron 2,8 millones de quintales.
Respecto a las dificultades que enfrenta el sector, Rojas indicó que los perjuicios de la demora de la zafra derivados de las lluvias impactan en la maduración y calidad de la caña por el encharcamiento de los centros de producción. La iliquidez del sector de los cañeros preocupa.
Se conoció que el lunes el ingenio Aguaí prenderá sus motores, luego lo hará San Aurelio y posteriormente La Bélgica. Este año Aguaí incursiona en la producción de azúcar proyectando adicionar un millón de quintales de azúcar a los 11 millones que prevén procesar los cinco ingenios cruceños y Bermejo, de Tarija. El consumo nacional ronda 8,5 millones de quintales.
Desde Bermejo se informó que el inicio de la zafra es incierto debido a que los fabriles y los productores de caña no se ponen de acuerdo para suscribir el contrato de molienda.
Merma del área productiva
Las lluvias impidieron este año las labores agrícolas de ampliación y renovación de cañaverales. Por este motivo, el área tradicional donde se llevan a cabo estos trabajos agrícolas se redujo de 23.000 a 8.000 hectáreas este año.
En esta gestión los ingenios apuntan a la eficiencia productiva para acortar los meses de zafra y así poder renovar y expandir los cañaverales
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